http://www.jrebelde.cu/2006/abril_junio/mayo-6/mundo_que.html

Gran Bretaña/Elecciones municipales

¿Qué esperabas, Tony?

Luis Luque Álvarez

luque@jrebelde.cip.cu

fotos AP

Curioso proceder el de los músicos del Titanic, inmortalizados en más de un filme: mientras la inmensa nave se iba a pique, ellos continuaban, violines en mano, arrancando notas a sus instrumentos.

Hoy, tras el conteo de votos de las elecciones municipales celebradas solo en Inglaterra —sin incluir Londres—, se ve que el Partido Laborista, del primer ministro Tony Blair,  también avanza con dificultad entre témpanos flotantes. De las 4 360 concejalías en disputa, los laboristas obtuvieron 1 439, quedando por debajo de los tories (conservadores) —a quienes la política escasamente izquierdista del Primer Ministro les ha robado «contenido» como oposición de derecha—, quienes ganaron 1 830. Los liberales-demócratas dieron un salto considerable con 909 concejales y el resto se reparte entre una decena de otros partidos.

De tal modo, el partido de gobierno continúa «cuesta abajo en su rodada» a casi un año de una penosa victoria en las elecciones legislativas. Podría ser una señal de lo que le espera en 2009. Pero Blair no piensa postularse en ese entonces, y está empeñado en preparar una salida decorosa del poder. Para ello, optó por remodelar su gabinete, afectado por numerosos escándalos en los últimos tiempos, por los que el enojo ciudadano ha pasado cuenta.

Hay cambios. Sin embargo, el ex ministro de Salud, Frank Dobson, utilizó una imagen familiar: «Esto es como cambiar las sillas en la cubierta del Titanic mientras se hunde».

El ajedrez queda como sigue: fue destituido el ministro del Interior Charles Clarke, el mismo que justificó el asesinato a mansalva del joven brasileño Jean Charles de Menezes a manos de la policía, tras los atentados de Londres en julio pasado. «(Los agentes) están trabajando en condiciones muy difíciles para tratar de protegernos, y a veces deben tomar decisiones muy duras», dijo entonces.

Ahora era acusado por no haber deportado a más de mil ex convictos extranjeros desde 1999 hasta la fecha. Está claro que los delincuentes peligrosos en el Reino Unido no son únicamente foráneos, pero ya Clarke estaba en el punto de mira. Se convirtió en un lastre, y Blair decidió sencillamente zafárselo.


Jack Straw entró en la permuta.

Otro que ha visto disminuidas sus responsabilidades fue el viceprimer ministro John Prescott, fustigado por la prensa, al descubrírsele una relación extramarital (también el chisme pesa); aunque quizá la permuta más significativa ha sido la del titular de Relaciones Exteriores, Jack Straw, y su nuevo rol como jefe de la bancada laborista en la Cámara de los Comunes.

Según un comentarista de The Guardian, el canciller cayó atropelladamente por expresar en más de una ocasión que estimaba «inconcebible» una acción militar contra Irán, por lo que Downing Street le aconsejó reiteradamente ser menos categórico y dejar todas las opciones sobre la mesa. Tal como dice Bush. A fin de cuentas, Blair no le hace ascos a las guerras, como se ha comprobado...

Movidas aparte, se refuerzan las voces para que el Primer Ministro acabe de marcharse y deje el puesto en manos de su ministro de Finanzas, Gordon Brown. Los resultados de la votación están ahí, y son un claro barómetro político.

¿Acaso esperabas otra cosa, Tony?