RADIO TAINO In Cuba. Non-elective reforms By Jorge Gómez Barata A CubaNews translation. Edited by Walter Lippmann. Criticizing the number of reforms aimed at improving socialism and led to the collapse of the Soviet Union, Fidel Castro used two metaphors with similar meanings: "It is easy to let the genie out of the bottle and to free the birds from their cage. The hard part is making them return." He could have added, "It is impossible to make an omelet without breaking eggs". The lessons of the Soviet process, the harassment of the United States, and the determination to not put the social and economic achievements at risk, far beyond the inevitable deterioration brought about by the crisis, set the pace of the Cuban reforms whose objective is known as "updating the economic model". It is likely that the economic changes will reach a stage at which substantial political adjustments may become necessary to move forward. No Marxist would admit that the economic foundation could be changed without equivalent modifications in the political and juridical superstructure. By their trickledown effects, economic adjustments lead to what we could call: "Non-electoral reforms". Certainly the highest circles in the Party are aware of this, and probably there is a plan. Perhaps they are quietly taking steps in these directions. The questions are: How far can they go with a style that for the sake of discretion excludes social participation? Can the leading circles -even if they are efficient enough- carry out the task on their own and present the results to society, "key in hand"? The processes involved in the "non-electoral reforms" are of high theoretical complexity but can be prepared with time, serenity and the participation of various social actors. An example of these reforms is the need to update, in relatively urgent terms, the Constitution of the Republic and the Electoral Law in order to make available --in keeping with updated doctrines-- a better socialist constitution, and a more socialist democracy. THE PROPOSAL The Party, in its role as leader of society, could convene a "Constitutional Forum" made of people representative of Cuban society. Such an "ad hoc" entity, composed of parliamentarians, persons appointed by the government, the political, social, academic and cultural organizations (preferably elected) and guests; assisted by the necessary experts and technicians, would be in charge of drafting substantial proposals in a given term. Society, the institutions and all Cubans residing everywhere, regardless of their creed or political color would be summoned to participate --taking advantage of the technological possibilities that allow instant communication at a distance-- with proposals and suggestions they could send via web pages and e-mail to the Constitutional Forum. With these contributions and their own ideas, members of the Forum would draft a consensus proposal for the reform of the Constitution and the Electoral Law to submit to the Party leadership  for further action. In this way, the traditional procedure of drafting documents up above and afterwards gathering opinions would be inverted. Now opinions would be gathered first for the drafting of the documents. Along the process, some of the proposals could be published to enrich participation and social debate. Non-electoral reforms need coherent solutions. Change comes about by changing. See you there. Source: Radio Taino (Havana), June 10, 2013.
		RADIO TAINO EN CUBA. REFORMAS NO ELECTIVAS 10/06/2013 Por Jorge Gómez Barata Para referirse críticamente al conjunto de reformas que pretendieron perfeccionar el socialismo y condujeron al fin de la Unión Soviética, Fidel Castro utilizó dos imágenes con un mismo significado: "Es fácil liberar al genio de la botella y soltar los gorriones de la jaula…Lo difícil es hacerlos retornar". Pudo haber añadido que: "No es posible comer tortilla sin cascar los huevos". Las lecciones del proceso soviético, el acecho de los Estados Unidos y la determinación de no arriesgar las conquistas sociales y económicas más allá del inevitable deterioro causado por la crisis, marcan el ritmo de las reformas en Cuba cuyo objetivo conocido es "actualizar el modelo económico". Es probable que los cambios económicos lleguen a un punto a partir del cual, para continuar avanzando, se requiera de ajustes políticos más o menos sustanciales. Ningún marxista admitiría que pueda cambiarse la base económica sin que se operen también modificaciones equivalentes en la superestructura jurídica y política. Por gravedad, los ajustes económicos conducen a lo que pudiéramos llamar: "Reformas no electivas". Es seguro que en las máximas instancias del Partido existe claridad al respecto y probablemente un plan, quizás incluso en silencio se dan pasos en esas direcciones. Las preguntas son: Hasta donde se puede avanzar con un estilo que para salvar la discreción excluye la participación social y si, por competentes que sean, pueden los círculos dirigentes realizar en solitario esa labor y presentarlas a la sociedad "llave en mano". Los procesos a los que aluden las "reformas no electivas" son de extrema complejidad teórica aunque susceptibles de ser preparados con tiempo, serenamente y con participación de diversos actores sociales. Ejemplo de tales reformas son la necesidad de, en plazos más o menos perentorios, actualizar la Constitución de la República y la Ley Electoral para, a tono con las doctrinas vigentes, disponer de una constitución socialista mejor y de una democracia más socialista. LA PROPUESTA El Partido, en su condición de dirigente de la sociedad y el Estado, pudiera convocar a un "Foro Constitucional", integrado por personas representativas de la sociedad cubana. Esa entidad "ad hoc", formada por diputados, personas designadas por el gobierno, las organizaciones políticas, sociales, académicas y culturales, (preferiblemente electas) e invitados, asistidos por los expertos y técnicos necesarios, sería la encargada de, en un plazo determinado, realizar propuestas sustantivas. La sociedad, las instituciones y los cubanos residentes en cualquier parte, sin importar sus credos o colores políticos serán convocados para, aprovechando las bondades de las nuevas tecnologías, participar a distancia con propuestas y sugerencias que, mediante páginas WEB y direcciones de correo electrónicas y postales harían llegar al Foro Constitucional. Con tales aportes y sus propios juicios, los integrantes del Foro elaborarían y consensuarían propuestas para la reforma de la Constitución y la Ley Electoral, que harían llegar a la dirección del Partido para que obre en consecuencia. De ese modo se invertirá el método tradicional de redactar documentos desde arriba para luego recoger opiniones. En este caso, primero se acopiarían opiniones para con ellas elaborar los documentos. En el trascurso del proceso, pudieran publicarse algunas de las propuestas para enriquecer la participación y el debate social. Las reformas no electivas necesitan soluciones coherentes. Se cambia, cambiando. Allá nos vemos. http://www.radiotaino.com.cu/especial.php?id=198