NORTH DAKOTA MAKES A MOCKERY OF WALL STREET BANKING
By Manuel E. Yepe

A CubaNews translation.
Edited by Walter Lippmann.

The state-owned Bank of North Dakota (BND) in the United States makes a mockery of Wall Street's casino banking system and consequently it is targeted by financial elites.

North Dakota is the very definition of a "red state", because this is the color Americans give to the states that traditionally vote Republican. In recent elections it voted 58 percent to 39 percent for Romney over Obama, and its statehouse and senate have a total of 104 Republicans and only 47 Democrats. The Republican super-majority is so conservative it recently passed the nation's most severe anti-abortion resolution a measure that declares a fertilized human egg has the same right to life as a fully formed person.

But paradoxically, North Dakota is also "red" in another sense: it fully supports its state-owned Bank of North Dakota (BND), the only "socialist" bank that exists in the US. Why is financial socialism still alive in North Dakota? Why haven't the North Dakotan free-market crusaders slain it dead? Well…because it works.

I took the data and comments above from a work published on the AlterNet website on March 26, 2013 by the prolific American writer and Executive Director of the Labor Institute, Les Leopold.

In 1919, the Non-Partisan League, a vibrant populist organization, won a majority in the legislature and voted the bank into existence. The goal was to free North Dakota farmers from impoverishing debt dependence on the big banks in the Twin Cities (Minneapolis and St. Paul), Chicago and New York.

More than 90 years later, this state-owned bank is thriving as none other; it helps the state's community banks, businesses, consumers and students obtain loans at reasonable rates. It also delivers a handsome profit to its owners -- the 700,000 residents of North Dakota. In 2011, the BND provided more than $70 million to the state's coffers.

Extrapolate that profit-per-person to a big state like California and you'd looking at an extra $3.8 billion a year in state revenues that could be used to fund education and infrastructure.

But precisely for these reasons this is one of America's best kept secrets, says Les Leopold.

Anywhere in the US, the state and local taxes as well as all other payments to the state are deposited in the banks. If you're in any state but North Dakota, nearly all of these deposits end up in Wall Street's huge private banks, because those banks are the only entities large enough to handle the load. The vast majority of the nation's 7,000 community banks are too small to provide the array of cash management services that state and local governments require. This is how at least $1 trillion of local tax dollars paid by the population find their way to Wall Street.

In North Dakota, however, all that public revenue runs through its public state bank, which in turn reinvests in the state's small businesses and public infrastructure via partnerships with 80 small community banks. As a state owned agency, the BND provides loans at below-market interest rates to businesses if and only if those businesses create at least one job for every $100,000 loaned.

If the $1 trillion that now flows to Wall Street instead were deposited in public state banks in all 50 states using this same approach, up to 10 million new jobs could be created. As simple as that!

Wall Street prefers the casino banking system that offers its executives and traders gambling opportunities that allow them to make seven- and eight-figure salaries.

Is it clear why Wall Street tries so hard to eliminate North Dakota's example?

The big Wall Street private banks seem to own Washington; they are the predators and the citizens the prey.

Les Leopold believes the Bank of North Dakota proves that it doesn't have to be that way and says this is the time "to fight for public state banking in a big way."

April 2013.

April 2013.
   
    DAKOTA DEL NORTE SE BURLA DE WALL STREET

Por Manuel E. Yepe

El banco estadual de Dakota del Norte, en Estados Unidos hace burla de la banca de casino de Wall Street, y por tal motivo está en la mirilla de las élites financieras.

Dakota del Norte es por su definición electoral un estado “rojo” porque ese es el color con que los estadounidenses identifican a los estados tradicionalmente dominados en los procesos electorales por los votos del partido republicano. El 58% de los electores de ese estado votaron por Romney y sólo 39% lo hicieron por Obama en los más recientes comicios presidenciales. En su parlamento estadual hay 104 congresistas republicanos y sólo 47 demócratas. La mayoría republicana es tan conservadora que recientemente aprobó la resolución contra el aborto más severa del país porque declara que un huevo humano fertilizado tiene los mismos derechos a la vida que una persona totalmente formada.

Pero paradójicamente a Dakota del Norte se le califica de “rojo” en otro sentido. Se le aplica ese término porque su estadual Banco de Dakota del Norte (BND) es visto como el único “socialista” en los Estados Unidos. ¿Por qué el “socialismo” financiero sigue vivo en Dakota del Norte? ¿Por qué los cruzados del libre mercado en Dakota del Norte no lo han hecho desaparecer? Pues… porque funciona. Los anteriores datos y juicios los he tomado de un trabajo del prolífico escritor estadounidense y director ejecutivo del Labor Institute (Instituto del Trabajo), Les Leopold, aparecido el 26 de marzo de 2013 en el sitio AlterNet.

En 1919, la Liga No-Partidista (Non-Partisan League), entonces una vibrante organización populista mayoritaria en la legislatura de Dakota del Norte, votó por la creación de este banco.

El objetivo era liberar a los agricultores de su grave estado de pobreza y de su dependencia por endeudamiento de los grandes bancos en las Ciudades Gemelas (Minneapolis y St. Paul), Chicago y Nueva York.

Noventa años más tarde, este Banco estadual está prosperando como ninguno; presta a tasas razonables a bancos comunales del estado, a empresas, consumidores y estudiantes. También ofrece significativos beneficios para sus 700,000 propietarios, que son los residentes de Dakota del Norte. En 2011, el BND aportó más de $70 millones a las arcas del estado.

Si se extrapolara ese beneficio por habitante a un estado grande como California habría que hablar de $3.8 mil millones de ingresos anuales adicionales para el estado que podrían utilizarse para financiar la educación y la infraestructura.

Pero, precisamente por ello, este es uno de los secretos mejor guardados de los Estados Unidos de América, dice Les Leopold.

En cualquier estado de los Estados Unidos, los impuestos

- federales y locales- y demás pagos al estado, se depositan en los bancos. Pero en cualquier otro estado que no sea Dakota del Norte estos depósitos van a parar a los enormes bancos privados que forman Wall Street, que posan como los únicos capaces de manejar tan grandes cargas de dinero. Se argumenta que los otros 7000 bancos del país son demasiado débiles para manejar los servicios de administración bancaria que requieren los gobiernos estaduales y locales. Es así como unos mil millones de dólares provenientes de los pagos de impuestos por las poblaciones locales llegan a Wall Street.

En Dakota del Norte, sin embargo, los ingresos públicos, como todo lo que corre a través de su banco estadual, se reinvierte en las empresas estaduales y la infraestructura pública mediante alianzas con unos ochenta pequeños bancos de las comunidades.

Como agencia del estado que es, el BND ofrece préstamos a tasas de interés inferiores a las del mercado a las empresas que crean al menos un empleo por cada cien mil dólares facilitados.

Si los mil millones que ahora fluyen a Wall Street fueran depositados en los bancos públicos estaduales de los 50 Estados con el mismo enfoque que aplica Dakota del Norte, se podrían crear hasta 10 millones de nuevos empleos. ¡Tan sencillo como eso!

Wall Street prefiere el modelo de banca de casino que brinda a sus ejecutivos y comerciantes oportunidades de juegos que les posibilita multiplicar sus sueldos hasta las siete u ocho cifras.

¿Se explica por qué Wall Street se esfuerza tanto por liquidar el ejemplo de Dakota del Norte?

Los grandes bancos privados de Wall Street se desempeñan cual dueños de Washington; son los depredadores y la ciudadanía es la presa. Les Leopold considera que el Banco de Dakota del Norte demuestra que esto no tiene por qué ser necesariamente así y llama a “luchar en grande por una banca estatal”.

Abril de 2013.