Despite the broad approach I made with the subject, I believe the text
is still only basic; each chapter deserves to be deeper. The
novelty of the approach resides in the fact that the contents are dealt
with from at least six branches of Law. Each chapter ends with a
statement of the illegality of the blockade in that particular area. The
subject had not been approached like this in previous writings, but only
from the perspective of international political relations which I, of
course, also include in the topic of International Law. International
Policy has a juridical expression based on the UN Charter and on civil
and political agreements. This is why we are going to launch the book at
ISRI. This is significant; it was a decision of MINREX [Ministry for
Foreign Affairs]. The US
cannot call things by their own name, because they would be
acknowledging its real objective: it is an act of war, a crime that,
whichever the extent of the offense, means injustice, illegality and
lack of humanitarianism. The
book explains that all the owners affected by the nationalization
-regardless their country of origin- were compensated, and only the
United States in its unrelenting endeavor to maintain political and
economic pressure against the Cuban Revolution, frustrated what should
have been a peaceful and legal process that would have allowed for the
compensation of US nationals. In
class I tell my students: The US exports cars, cotton, corn, wheat and
also norms for economic coercion. It is the only country in the world
that does that. Rights among states must be reciprocal. It is illegal to
make its measure stand beyond its borders. That is, they can impose
measures against Cuba within US territory and on US citizens wherever
they are, but they must not make them stand outside US territory and on
other citizens who are not US citizens. My
premise is that extra territoriality is not synonymous to illegality;
but I make it clear that even when there are certain types of laws that
can stand extra territorially, it is always the State recipient of the
foreign law that has the faculty to accept it under its own system of
International Private Law, and I prove that the blockade is and abusive
and clearly illegal attribution. |
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![]() Publicado en Cuba Trabajadores (http://www.trabajadores.cu) Inicio > Un arma más contra el bloqueo Un arma más contra el bloqueo Creado 2012-11-11 21:26 ![]() Alina Martínez Triay y Alina M. Lotti/PDF. Foto: / 11-11-2012 / 21:26 Despertar el interés por el estudio del fenómeno ilegal más prolongado del siglo XX y que ya excede la primera década del siglo XXI; ofrecer un arma más que pueda servir para combatirlo en cualquier tribuna y ripostar a los “teóricos” que pretenden justificarlo; ayudar a quitar la venda de los ojos a “los inocentes”, que todavía no comprenden su verdadera naturaleza; y dejar al desnudo la ilegalidad manifiesta y la injusticia, son los propósitos del libro ¿Embargo o bloqueo? La instrumentación de un crimen contra Cuba, del prestigioso jurista Rodolfo Dávalos Fernández. El profesor principal de Derecho Internacional privado de la Facultad de Derecho de la Universidad de La Habana y Presidente de la Corte Cubana de Arbitraje Internacional Comercial abordó, en entrevista exclusiva con Trabajadores, las características de esta importante obra que será presentada hoy en el Instituto Superior de Relaciones Internacionales (ISRI) y mañana en la sede de la Organización de Naciones Unidas, coincidiendo con la votación del Proyecto de Resolución contra el bloqueo. El libro parte de su experiencia personal en el enfrentamiento al bloqueo y tiene un enfoque novedoso… Es así. El origen del libro está en mi experiencia de muchos años de negocios en el exterior. Choqué con el bloqueo en las transacciones comerciales de Cuba cuando por cometer un error embargan una transferencia o dan al traste con una negociación ante el temor que infunden a los empresarios extranjeros. Puedo decir que sentí en carne propia la mordedura del bloqueo. Él me hizo agudizar mi sentido jurídico de la relación mercantil internacional, me llevó a buscar formas de evadirlo en las transacciones internacionales, y me fue creando un sentimiento de querer algún día escribir estas experiencias. A pesar de la amplitud con que abordo el tema, considero que el texto es elemental, cada capítulo merece profundización. Los análisis se complementan con anexos que contienen una cronología sobre el bloqueo, las prerrogativas del Presidente de Estados Unidos para modificarlo y las facultades del Congreso para levantarlo, el texto de la Ley de Reafirmación de la Dignidad y Soberanía cubana (Ley 80 de 1996) y el comportamiento histórico de la votación en la ONU contra el bloqueo. Además, la editorial Capitán San Luis que tuvo a su cargo la edición incluyó las dramáticas historias con fotos de siete niños cubanos afectados por el bloqueo, nombrados por el Canciller cubano al finalizar su intervención en Naciones Unidas el pasado año. La novedad del enfoque de los contenidos es que están abordados al menos desde seis ramas del Derecho. Cada capítulo termina con un mensaje de la ilegalidad del bloqueo en esa materia. Así no se había escrito hasta ahora del tema, sino solo desde el punto de las relaciones políticas internacionales, aunque también las incluyo dentro del Derecho Internacional. La Política Internacional tiene una expresión jurídica, se basa en la Carta de la ONU, los pactos de los derechos civiles y políticos. Por eso vamos a presentar el libro en el ISRI, es significativo, una decisión del MINREX. Desde el propio título se trata de la falsificación del lenguaje por Estados Unidos para calificar su guerra económica contra Cuba. ¿Qué opinión le merece ese proceder? Estados Unidos no puede llamar las cosas por su nombre porque estarían reconociendo su verdadero objetivo: el es una medida de guerra, un crimen, que cualquiera que sea la amplitud del delito, es injusticia, ilegalidad y falta de humanidad. Utilizan la palabra embargo, admitida en la doctrina de la jurisprudencia, que consiste en la retención de bienes del deudor. La pretendida deuda es la justificación. La deuda se cobra: o me pagas o te embargo, eso que parece tan simple y que lleva el conflicto al ámbito bilateral es la envoltura, el engaño, la falsificación de la verdadera intención. El bloqueo cumple un objetivo político: derrocar la Revolución cubana. No es como Estados Unidos quiere hacer creer al mundo, un diferendo bilateral histórico producido por las supuestamente injustas nacionalizaciones de las propiedades de personas naturales o jurídicas de nacionalidad estadounidense durante los primeros años de la Revolución. En el texto se explica que todos los propietarios afectados por las medidas nacionalizadoras, con independencia de su país de origen, fueron compensados y solamente Estados Unidos en su marcado afán por mantener las presiones políticas y económicas contra la Revolución cubana malogró lo que debió haber sido un proceso pacífico y legal, que permitiera compensar a sus nacionales. En ese mismo capítulo se señala que si están creadas las condiciones jurídicas y jurisdiccionales que permiten dirimir en foros de competencia universalmente admitidos las discordias y diferencias por cualquier reclamación, aun cuando tenga su origen en nacionalizaciones de propiedades extranjeras, ¿qué justificación puede dársele entonces al bloqueo? Por todo eso decimos que constituye una medida groseramente obsoleta, ultrapasada, incivilizada, ajena por completo a las normas de convivencia de la Comunidad Internacional. Usted afirma que Estados Unidos es el único país del mundo exportador de normas de coerción económica… En clase se lo digo a los alumnos: Estados Unidos exporta automóviles, algodón, maíz, trigo y también normas de coerción económica. Es el único país del mundo que hace eso. Los derechos entre los Estados son recíprocos. La ilegalidad está en querer hacer valer su medida más allá de la frontera, es decir, ellos pueden imponer medidas contra Cuba dentro del territorio estadounidense y a ciudadanos norteamericanos donde quiera que se encuentren, pero no hacerlas valer fuera del territorio de los Estados Unidos y a otros ciudadanos que no son norteamericanos. Está bien dicho lo de la extraterritorialidad, eso es una forma fácil de identificarle al pueblo, que no tiene que hablar con una cultura jurídica desarrollada, que es algo ilegal, lo que no quiere decir que todas las leyes sean solo territoriales. Esto es bueno que se conozca porque los teóricos del imperio intentan sembrar la confusión con planteamientos doctrinales acerca de la posibilidad legal para un Estado de dictar normas para regular hechos ocurridos y conductas manifestadas fuera de su territorio, aun afectando a otros Estados soberanos. El tema es polémico y complejo pero no por eso fue soslayado en la obra. Asumo que extraterritorialidad no es sinónimo de ilegalidad, pero dejo claro de que si bien hay ciertas clases de leyes que pueden surtir efecto extraterritorial, es siempre el Estado receptor de la ley extranjera que se pretende aplicar, el único facultado para aceptarla, en virtud de su propio sistema de Derecho Internacional privado y demuestro que en el caso del bloqueo se trata de una atribución abusiva y manifiestamente ilegal. A pesar del tortuoso entramado de disposiciones que conforman el bloqueo, ¿considera que el Presidente de Estados Unidos puede modificarlo? A despecho del rechazo internacional al bloqueo, este se mantiene prácticamente intacto. Los cambios tan mentados por el actual mandatario estadounidense, se limitan a ciertas flexibilizaciones de los viajes a Cuba por parte de los cubanos residentes en Estados Unidos y al envío de sus remesas. En el anexo a que hice referencia sobre las prerrogativas del Presidente de Estados Unidos para modificar el bloqueo, ridiculizo esa supuesta “flexibilización” porque demuestro que el mandatario puede adoptar diversas medidas hasta reducirlo a su mínima expresión, pero no lo hace. No obstante, por su carácter arbitrario, injusto, ilegal, criminal, violatorio del Derecho Internacional, y por la condena de que es objeto año tras año por la comunidad internacional en la Asamblea General de las Naciones Unidas, lo que se impone no es andar con medias tintas sino levantarlo. URL del envío: http://www.trabajadores.cu/news/20121111/2513189-un-arma-mas-contra-el-bloqueo
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