SWEET DISAGREEMENTS BETWEEN THE US AND AL QAEDA
By Manuel E. Yepe

A CubaNews translation. Edited by Walter Lippmann.

Susanne Posel, Director and Manager of the alternative digital publication Occupy Corporatism, in her article "Clinton and al-Qaeda: The Propaganda Wars Continue" tells us about the most recent episode in the love/hate story that has been in the background of a US war against terrorism that has cost the American people and humankind countless lives and resources.

Last May, in her keynote speech at a gala dinner in Tampa, Florida, Secretary of  Hillary Clinton --says Posel-- admitted that Washington is engaged in propaganda wars with Al Qaeda, one of its own operatives. Clinton said this in the presence of Admiral Bill McRaven, head of the US Special Operations Command, and more than 100 US and allied nations' special operations commanders.

Addressing the concrete situation, she said the US is buying space in the same Yemeni tribal websites Al Qaeda normally uses in the Arab Peninsula (AQAP). In this way Washington seeks to counter the campaigns of the terrorist organization whose impact on Middle Eastern masses is less than they have been bragging about, she added.

"If Al-Qaeda posts pictures of the US flag draped over coffins, Washington spreads on the same website photographs of Yemeni civilians in coffins to show the toll Al-Qaeda attacks have taken on the Yemeni people," Clinton said.

Current Yemeni President Abed Rabbo Mansour Hadi, who replaced Ali Saleh last February following an agreement promoted by the US and the Arab Gulf countries after popular uprisings that lasted for over a year, has had strong US backing in the present situation.

President Barack Obama recently released an Executive Order (EO) decreeing the "blocking of all property of persons threatening the peace, security, or stability of Yemen" and the right to confiscate all property and bank accounts in the United States that belong to persons of any nationality arrested and detained by federal agencies for assisting a terrorist group that threatens Yemen's peace, security and stability.

But, far from reducing Al Qaeda's terrorist attacks against Yemen as a result of the Executive Order, these have continued and, in Posel's view, it couldn't be otherwise "since al-Qaeda has always been the US government's go-to terrorist group; created and funded by their own federal agencies to be used when necessary for its policy to destabilize foreign governments".

Clinton herself confirmed that Al Qaeda was a creation of the US Government and admitted that accusing the organization of terrorist acts at present contradicts President Obama's statement after the capture and murder of Osama bin Laden that "we live in a post-Al Qaeda era".

According to Posel, the US State Secretary dealt in detail on the activities of the Center for Strategic Counterterrorism Communications (CSCC), an interagency group comprised of specialist, diplomats, State Department intelligence analysts, and highly qualified special operators who master Urdu, Arabic, and Somali to patrol the Internet.

She explained the CSCC patrols the Internet "because this is easier than hacking into sites covertly".

She added that at present the State Department works more actively with the Defense Department and the intelligence community using "soft diplomacy" as a weapon against terrorism and all forms of extremist propaganda.

Frequently, CSCC contacts users in on-line forums, but anonymity is essential to its work.

With sophisticated software, the Pentagon purveys false information, harasses users and introduces apocryphal messages in social network websites.

It systematically uses "sock puppets" (fake handles). These are false identities which allow them to engage in on-line conversations with coordinated answers, blog debate comments and instant messaging remarks. Thus the United States spreads Al Qaeda messages that are in fact elaborated by experts in federal intelligence agencies to influence American Internet navigators.

The US Administration is playing both sides of the coin to ensure the outcome they want, Susanne Posel concludes.

June 2012
   
    DULCES DISCORDIAS ENTRE EEUU Y AL QAEDA

Por Manuel E. Yepe

Susanne Posel, directora y administradora de la publicación alternativa digital “Occupy Corporatism” (Ocupar el Corporativismo), en un artículo titulado “Siguen las guerras propagandísticas entre Clinton y Al Qaeda” (Clinton-Al Qaeda: The Propaganda Wars Continue), relata el más reciente episodio de la historia de amor y odio que ha sido telón de fondo de una guerra estadounidense contra el terrorismo que ha costado a la humanidad y al propio pueblo norteamericano incalculables vidas y recursos materiales.

La Secretaria de Estado Hillary Clinton -dice Posel- reconoció que Washington está envuelto en guerras de propaganda con Al Qaeda, uno de sus propios operativos, al pronunciar el discurso principal en una cena de gala que tuvo lugar a fines de mayo en Tampa, Florida, en presencia del Almirante William McRaven, jefe del Comando Especial de Operaciones Especiales y un centenar de comandantes de operaciones especiales de Estados Unidos y de otras naciones aliadas suyas.

Al referirse a la situación concreta, manifestó que su país está comprando espacios en los mismos sitios Web tribales de Yemen que habitualmente usa la organización Al Qaeda en la Península Arábiga (AQAP). Washington trata con ello de hacer frente a las campañas de esa formación terrorista cuya influencia en las masas medio orientales calcula menor que aquella de la que presume, dijo.

“Si Al Qaeda publica fotos de ataúdes cubiertos con banderas estadounidenses, Washington difunde -en los mismos sitios Web- fotos de ataúdes con civiles yemenitas para mostrar el costo en víctimas de los ataques de Al Qaeda para el pueblo yemenita", manifestó Hillary Clinton.

El actual presidente yemenita Abed Rabbo Mansour Hadi, que remplazó en febrero a Ali Saleh a raíz de un acuerdo promovido por Estados Unidos y los países del Golfo Árabe tras los levantamientos populares que tuvieron lugar por más de un año, ha tenido un fuerte respaldo norteamericano en la situación presente.

El presidente Barack Obama emitió una Orden Ejecutiva por la que decretó “el bloqueo de propiedades de personas que amenacen la paz, la seguridad o la estabilidad de Yemen” y el derecho a la confiscación de todas las propiedades y cuentas bancarias en Estados Unidos de personas de cualquier nacionalidad arrestadas y detenidas por las correspondientes agencias federales por prestar asistencia a algún grupo terrorista que amenace la paz, la seguridad y la estabilidad de aquel país.

Pero, lejos de disminuir los ataques terroristas de Al-Qaeda contra Yemen por efecto de la Orden Ejecutiva de la Casa Blanca, éstos han continuado, lo que -según Posel- “y no podría ser de otra manera, si se considera que Al Qaeda ha sido siempre el grupo terrorista recurrente en las acusaciones de EEUU, que lo creó y financió por medio de sus agencias federales para que le sirviera cuando fuera necesario a su política desestabilizar de algún gobierno extranjero”.

La propia Clinton ratificó que Al Qaeda fue una creación del gobierno de EEUU y admitió que acusar a esta organización de acciones terroristas en el momento actual contradice la afirmación del presidente Obama, tras la captura y asesinato de Osama bin Laden, de que “vivimos en una era post-Al Qaeda”.

Según relata Posel, la canciller estadounidense se extendió acerca de la actividad del Centro de Comunicaciones Estratégicas de Contra-terrorismo (CSCC, por sus siglas en inglés), grupo interinstitucional integrado por expertos, diplomáticos, analistas de inteligencia del Departamento de Estado, así como operadores especiales muy calificados que dominan las lenguas urdú, árabe y somalí en función del patrullaje de la web, según manifestó.

Aclaró que el CSCC patrulla la Internet “porque es más fácil hacerlo que hackear los sitios de manera encubierta”.

Destacó que actualmente el Departamento de Estado trabaja más activamente con el Departamento de Defensa y la comunidad de inteligencia usando la “diplomacia blanda” como arma contra el terrorismo y todas las formas de la propaganda extremista.

Frecuentemente, CSCC contacta con usuarios en fórums en línea pero el anonimato es esencial en su trabajo.

Con sofisticados software, el Pentágono adultera información, acosa a los usuarios e introduce mensajes apócrifos en sitios de medios sociales.

Sistemáticamente, el Pentágono utiliza “sock puppets” o “fake handles”. Se trata de identidades falsas contra las que sostiene aparentes debates en blogs y diálogos en línea con respuestas coordinadas, o a las que le formula observaciones en mensajes instantáneos. De tal manera, Estados Unidos difunde mensajes de Al Qaeda que en verdad son elabora dos por expertos de las agencias federales de inteligencia para influir en los internautas norteamericanos.

La administración estadounidense juega así a ambas caras de la moneda para asegurarse los resultados, finaliza Susanne Posel.

Junio de 2012.