Dark Hands Threaten Not Only Piedad Cordoba

Marina Menéndez QuinteroMarina Menéndez Quintero marina@juventudrebelde.cu
May 11, 201221:09:40 CDT


A CubaNews translation. Edited by Walter Lippmann.

No other threat could better reveal the nature of those who make it. If death is now stalking the peace and life champion Piedad Córdoba, we know that behind the threats are the dark hands of the most retrograde sectors of her nation as well as those of the paramilitary forces which were in the past promoted by those who used them as arrowheads against the insurgents and thus extended far beyond what was (or is?) believed to be their social background.

With this news comes a reason for serious concern: the confirmation that in Colombia survives and –are renewed-- the practices of those death squads that at some point President Alvaro Uribe boasted of having demobilized; bands that committed massacres and selective crimes which made the country have the highest number of murdered union leaders and social leaders in Latin America. 

A plan to murder the ex-Senator for $565, 000 dollars has been disclosed. But the hideous action that some pretend to pay for does not surprise us. Uribe himself used the method to obtain information on and the capture of guerrilla leaders.
 
A few hours ago this was denounced by Colombianos y Colombianas por la Paz, an organization led by Piedad who play a key role in the return to civilian life of FARC prisoners recently freed and which promotes a negotiated solution to the armed conflict. This is reason enough for the “hard” sectors to dislike her, but not the only motive as she herself has suggested.

The plan against her integrity emerges at a time when many are discussing that which will undoubtedly be a momentous event: the birth of the Marcha Patriotica [
Patriotic March] the widest –and therefore powerful- social body Colombia has ever had.

It wasn’t born as a party, but it may become one that would overtake groups that had never had so much strength. The purpose of its leaders is to unite the “democratic left” and carry it along, but its mere existence with so much representativeness makes it a political voice. It is made up of 1,800 popular organizations and is the most important expression of a Colombia that is not visible, shaded by wars, the paramilitary, a political web with frequent splashes from drug dealing, and a violence that makes victims of the poor and humble more frequently than of the guerrilla and soldiers who are casualties in the combats.

Such is the violence that is knocking at the doors and entering by the windows of the Marcha Patriótica . When the movement was introduced to the world with the gigantic march of 60,000 people that on last April 27 shook Bogotá, it already had a death. Two weeks later, Telesur reported that Communist Party member Jorge Gómez talked about the disappearance of two participants in the march, two murdered and seven captured. And Piedad is among the visible heads of that event.

For members of the new popular entity, the fact that several media presented the event as an action “financed” by FARC guerrillas or the result of an “idea” from the insurgence are attempts to “stigmatize” them. Media like Spanish El País, for example, wondered if this was the “political arm of the guerrilla…”

In a country like Colombia, such statements -apart from robbing the Marcha… of its authenticity as a legitimate representative of sectors involved in the struggle for democracy- may be very dangerous.

But this does not deny –or rule out- the fact that the movement could accept the insurgence within its ranks, which would somehow mean its insertion in civilian life. Couldn’t this lead to the silencing of weapons… a dream of the majorities in Colombia?

Interviewed by RCN after the mobilization, and according to the network, Piedad Córdoba declared the insurgence would have a space in the new political project and that she would “continue the dialogue started by Colombianos y Colombianas por la Paz to construct a final understanding between the different sectors in the country without resorting to negotiating tables or restricted spaces, but with the contribution of each one to achieve a comprehensive dialogue”

Looking at it from a different perspective, we can’t rule out the fact that the threats against Marcha Patriótica that come from the extreme reaction, are trying to strain a climate where, for the first time in several years, a different air is coming in. 

The commitment made by the FARC to renounce kidnapping and to unilaterally free the last paramilitary and policemen in their power –as demanded by the Government- and on the other hand the recent statement by President Juan Manuel Santos at the Cámara de Comercio de Bogotá during a seminar on electoral systems where he said “yes to politics” and “no to weapons” could be indications that something is moving.

Meanwhile, the relevant authorities have said they have taken note of the death threats to Córdoba… And they should. An attempt on the life of this courageous woman would hurt much more than Piedad.



 

 

   
   
 

Manos oscuras no están solo sobre Piedad

Marina Menéndez QuinteroMarina Menéndez Quintero •marina@juventudrebelde.cu
11 de Mayo del 2012 21:09:40 CDT

Ninguna otra amenaza podía evidenciar mejor la naturaleza de quienes la profieren. Si la muerte pende hoy sobre la defensora de la paz y de la vida Piedad Córdoba, se sabe que detrás están las manos oscuras de los sectores más retrógrados y reaccionarios de su nación junto a las de las fuerzas paramilitares, prohijadas en otros tiempos por quienes las usaron como punta de lanza contra la insurgencia, y extendidas por eso contra todo lo que se estimó (¿o se estima?) su base social.

Tangencialmente, es esa una de las alertas más preocupantes que sale a flote con la noticia: confirmar que sobreviven —y se renuevan— en Colombia las prácticas de aquellos cuerpos de muerte que en algún momento se jactó de desmovilizar el ex presidente Álvaro Uribe; bandas gestoras de masacres y crímenes selectivos que han hecho del país uno de los que más sindicalistas y dirigentes sociales asesinados tienen.

Se ha sabido de la existencia del plan para asesinar a la ex senadora a cambio de ¡565 000 dólares! Pero la indigna acción que se pretende comprar con dinero tampoco asombra. El propio Uribe entronizó ese método para conseguir la delación y captura de líderes guerrilleros.

La denuncia la formuló hace pocas horas Colombianos y Colombianas por la Paz, que Piedad lidera, una organización protagonista de peso en la vuelta a la vida civil de los retenidos que las FARC liberó más recientemente, y que aboga por una salida negociada al conflicto armado. Ya ese es un motivo para que los sectores «duros» la vean con ojeriza; pero no el único, y ella misma lo ha sugerido.

El plan contra su integridad sale a la luz cuando no pocos especulan alrededor de lo que sin duda es un hito: el nacimiento de Marcha Patriótica, el más amplio —y por eso poderoso— cuerpo social con que haya contado Colombia.

No ha nacido como un partido pero podría llegar a serlo y le pasaría por delante a agrupaciones que nunca han exhibido tanta fuerza, aunque el propósito expresado por sus dirigentes es nuclear a la «izquierda democrática»; llevarla consigo. De hecho, su sola existencia, con tanta representatividad, la hace una voz con proyección en la política. Mil 800 organizaciones populares la integran, por eso constituye el más importante reflejo de una Colombia que no se ve, opacada por la guerra, los paramilitares, un entramado político salpicado no pocas veces por el narcotráfico, y esa violencia que se ha cebado mayormente en esos, los de abajo, víctimas más recurrentes de ella que los guerrilleros y soldados caídos en enfrentamiento.

Esa es la violencia que ya está tocando a las puertas de Marcha Patriótica y colándosele por las ventanas. Al momento de presentarse ante el mundo con la enorme manifestación calculada en 60 000 personas que estremeció el 27 de abril pasado a Bogotá, Marcha… ya reportaba un muerto. Dos semanas después, el miembro del Partido Comunista Jorge Gómez, citado por Telesur, hablaba de la desaparición de dos participantes de aquella movilización, dos asesinados y siete capturados... Y Piedad también está entre las cabezas visibles de aquel acontecimiento.

Para miembros del nuevo ente popular, el hecho de que medios de comunicación presentaran el suceso como un acto «financiado» por las guerrilleras FARC o resultado de una «idea» de la insurgencia, intenta «estigmatizarlos». Medios como el español El País, por ejemplo, se preguntaban si estamos ante «el brazo político de la guerrilla»…

En un país como Colombia, aseveraciones de esa naturaleza pueden resultar muy peligrosas, además de robar a Marcha… su autenticidad como representante legítima de sectores inmersos en la lucha democrática.

Pero ello no niega —ni descalifica —que el movimiento pudiera aceptar en sus filas a la insurgencia, lo cual implicaría antes, de algún modo, la inserción de esta en la vida civil. ¿Acaso no conduciría ello al silencio de las armas que las mayorías en Colombia quieren?

Interrogada por RCN después de la movilización, y según la cadena, la propia Piedad Córdoba aseveró que la insurgencia tendría cabida en el nuevo proyecto político y  que «continuará el diálogo epistolar que se inició con Colombianos y Colombianas por la Paz, para construir definitivamente el entendimiento de los sectores del país sin necesidad de mesas de negociación ni espacios demarcados, sino aportando cada uno lo que tenga para lograr un diálogo entre todos».

Mirándolo desde el otro extremo, no podría descartarse que las amenazas contra Marcha Patriótica, viniendo de la ultrarreacción, estuvieran procurando también enrarecer un clima donde por primera vez en varios años se respiran ciertos aires diferentes.

El compromiso por las FARC de rehusar al secuestro y la liberación unilateral de los últimos militares y policías que quedaban en su poder —como exigía el Gobierno— y, por otro lado, la reciente expresión del presidente Juan Manuel Santos dándole un «sí a la política» y un «no a las armas», durante un reciente seminario sobre sistemas electorales en la Cámara de Comercio de Bogotá, pudieran ser algunas muestras de que algo se mueve.

De momento, las autoridades concernidas han declarado tomar nota de las amenazas de muerte a Córdoba… Y hacen bien. Un eventual atentado contra esa mujer valerosa, no solo sería lesivo a Piedad.


http://www.juventudrebelde.cu/opinion/2012-05-11/manos-oscuras-no-estan-solo-sobre-piedad/