CAMBIOS EN CUBA blog

Wednesday August 4, 2010
Who should rescue the USAID

By M. H. Lagarde

A report in El Nuevo Herald says that the U.S. government is offering $3 million to promote small business in Cuba. The agency in charge of the new Yankee cash injection - "marginalized groups and those living in rural areas, ethnic and religious minorities, orphans and vulnerable children, rural women and persons with disabilities" - is nothing less the USAID, the agency in Washington that for years has been devoted to financing subversion in Cuba by the payment of sums to millionaire mercenary factions.

The new USAID program also could "benefit private farmers and private shelters, as well as barbershops and beauty salons by the government recently presented some of its employees" is presented as an altruistic gesture that reflects "a more indirect approach by the Obama administration to encourage changes in Cuba "and that" differs from the assumption of the George W. Bush "that is in the U.S. interest to stop the Cuban economy.''

As I understand, I have always said they are quite difficult to understand the offices of El Nuevo Herald, the American agency look with its new plan does not try to drown through legislation blocking the island's economy, but take advantage of measures of openness to "self-employed" which is now encouraging the Cuban government to make better use of their workforce, so that the U.S. government reversed the call and encourage small business in Cuba.

Until yesterday, a major criticism made by the champions of change against the island was that of excessive control by the socialist state of the call private. But apparently, according to the new program of this U.S. government agency, what is wrong is no state support to small businesses, but the condition of the independence and sovereign state.

That is, the philanthropic and altruistic USAID seeks to change the leadership of small businesses government blocked in Cuba, by blocking government, the United States, which is, after all, the primary responsibility for gaps and needs faced by Cubans in all companies, be they the size they are.

Does he think the U.S. government still can trick someone with the old story of the murderer turned savior? Will it really someone's head that Cuba will auction its economy and therefore its independence? Will he really the U.S. government any change in Cuba?

The new plan to "rescue" of the USAID should be dedicated to benefit the tens of millions of Americans who are victims of unemployment and marginalization, after the U.S. government dedicated to the rescue of bankrupt banks and big business automakers.

The money that the U.S. government, through USAID, seeks to promote small business in Cuba, out of the pockets of American taxpayers and those same pockets should be returned.
   
    http://cambiosencuba.blogspot.com/2010/08/quien-deberia-rescatar-la-usaid.html


miércoles 4 de agosto de 2010
A quién debería rescatar la USAID

Por M. H. Lagarde

Una información publicada en El Nuevo Herald asegura que el gobierno de EEUU está ofreciendo $3 millones para promover la pequeña empresa en Cuba. La agencia encargada de la nueva inyección de dinero yanqui a -"grupos marginados, como los que viven en áreas rurales, minorías étnicas y religiosas, huérfanos y niños vulnerables, mujeres de la zona rural y personas con impedimentos físicos”-, es nada menos que la USAID, la misma agencia de Washington que durante años se ha dedicado a financiar la subversión en Cuba mediante al pago de millonarias sumas a grupúsculos de mercenarios.

El nuevo programa de la USAID que también pudiera “beneficiar a agricultores privados y albergues privados, así como barberías y salones de belleza recientemente entregados por el gobierno a algunos de sus empleados” es presentado como un gesto altruista que refleja “un enfoque más indirecto de la administracion Obama para estimular cambios en la isla” y que “difiere de la suposición del gobierno de George W. Bush "de que es interés del EE.UU. frenar la economía cubana''.

Según entiendo -siempre he dicho que son bastante difícil de entender los despachos de El Nuevo Herald-, la agencia norteamericana busca con su nuevo plan no tratar de ahogar mediante leyes de bloqueo la economía de la Isla, sino aprovechar las medidas de apertura a los “cuentapropistas” que está alentando ahora mismo el estado cubano para una mejor utilización de su fuerza de trabajo, para que el gobierno de Estados Unidos invierta y fomente la llamada pequeña empresa en Cuba.

Hasta ayer mismo una de las principales crítica hechas por los paladines del cambio en contra la Isla era la del excesivo control por parte del estado socialista de la llamada iniciativa privada. Pero al parecer, de acuerdo con el nuevo programa de esta agencia gubernamental norteamericana, lo que está mal no es el apoyo del estado a la pequeña empresa, sino la condición independentista y soberana de dicho estado.

O sea, que la filantrópica y altruista USAID trata de cambiar la égida de los pequeños negocios del gobierno bloqueado, el de Cuba, por la del gobierno bloqueador, el de Estados Unidos, que es, a fin de cuentas, el principal responsable de las carencias y necesidades que sufren los cubanos en todas las empresas, sean estas del tamaño que sean.

¿Creerá el gobierno de Estados Unidos que todavía puede engañar a alguien con la vieja historia de el asesino devenido salvador?¿Pasará realmente por la cabeza de alguien que Cuba pondrá en subasta su economía y por tanto su independencia? ¿Querrá realmente el gobierno de Estados Unidos algún cambio en Cuba?

El nuevo plan de “rescate” de la USAID debía dedicarse a beneficiar a las decenas de millones de norteamericanos que son víctimas del desempleo y la marginalidad, luego de que el gobierno estadounidense se dedicara a rescatar de la bancarrota a los bancos y las grandes empresas automotrices.

El dinero con que el gobierno de Estados Unidos, a través de la USAID, intenta promover la pequeña empresa en Cuba, sale de los bolsillos del contribuyente norteamericano y a esos mismos bolsillos debería ser devuelto.