Archivo Central de las FAR
Memorias de Revolución
Lianet Arias Sosa
Cartas antiguas, fotos de hace décadas, papeles
maltratados por la vejez¼ Sobre las mesas destinadas a
la exposición, un dibujo lleva la impronta de Guayasamín.
Junto a él, y a modo de dedicatoria, el pintor escribió:
"A mis buenos amigos Raúl Castro y su esposa Vilma, con
mis mejores recuerdos".
El
Archivo Central de las FAR atesora el patrimonio de las
Fuerzas Armadas en múltiples formatos.
Este
es solo uno de los tantos tesoros que guarda el Archivo
Central de las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR) y
que se han mostrado por estos días, en su sede de La
Cabaña, a trabajadores y visitantes. La razón convence:
un 22 de enero, hace cincuenta años, comenzaron a
organizar este cúmulo de memorias tan vitales para la
nación.
"Atesoramos el patrimonio de las Fuerzas Armadas en toda
esa diversidad de formatos, o sea, textos, audiovisuales
y demás, a partir del Primero de Enero de 1959. Tenemos
documentos de mucho valor sobre la Crisis de Octubre, el
enfrentamiento a la piratería, las misiones
internacionalistas de Angola, Etiopía, Nicaragua,
Congo...".
Así lo refiere el mayor Alfredo Ríos Martínez, jefe del
Archivo. Por eso en la institución puede descubrirse un
álbum con la relación de los combatientes
internacionalistas caídos en Cangamba, pero también
informes sobre planes de agresión a Cuba desde Estados
Unidos o las notas de un mercenario acerca de la
organización de actividades bélicas en Playa Girón.
Cerca de tres millones de documentos son preservados en
cuatro grandes fondos. El primero, denominado Fondo
Histórico, reúne todos los impresos; el segundo conserva
la memoria audiovisual de las Fuerzas Armadas; el
tercero, llamado Fondo de Cuadros, contiene los
expedientes personales de ex militares y el cuarto aúna
los procesos judiciales vinculados a las FAR.
Hoy el Archivo brinda dos servicios esenciales. El
aseguramiento informativo a temas de investigación es
uno de ellos. Otro, de carácter público, resultan las
certificaciones a ex militares o a miembros de sus
familias.
n
CONTRA
el tiempo
Para
la capitán Teresa López, segunda jefa del Archivo, al
conservar la información de la prestación de servicios
en las Fuerzas Armadas y ser fuente casi obligada si se
trata de certificar la permanencia en sus filas, "las
personas se ven motivadas a concurrir al archivo". El
desarrollo del equipamiento y el empleo de nuevas
tecnologías han propiciado elevar la eficiencia del
servicio y facilitar su acceso a los usuarios fuera de
la capital.
Esta no es la única ocasión en que el Archivo apuesta
por las nuevas tecnologías. En muchos casos los
proyectos están en desarrollo y la instancia se ha
encargado de captar a jóvenes recién graduados de
Informática para pulir el camino. Hoy el empeño se
dirige, sobre todo, a digitalizar la documentación, de
manera que se preserve mejor la original y devengan más
eficientes los servicios. "Esa es la proyección que
tenemos para los próximos años", indica Ríos.
Al proceso de automatización se unen otras medidas.
Actualmente, el Archivo adquiere estantería más adecuada
para el almacenamiento. También el papel de filtro que
atenúa el efecto de los rayos solares a través de las
ventanas y equipos de climatización más eficientes. Todo
ello tributa a la conservación de los materiales. Pero,
¿qué sucede con la variable humana?
Nuestro colectivo se caracteriza por el esfuerzo y la
consagración al trabajo, no obstante, su preparación aún
es limitada, afirma Ríos:"Para minimizar ese problema
estamos enviando compañeros a cursos relacionados con el
tema de la conservación. Tenemos que llevar a cabo
acciones de conservación prácticas". Hoy las medidas se
ajustan, incluso, desde la producción de la información.
Un conjunto de normas y procedimientos rigen el tributo
de documentación patrimonial al Archivo Central de las
FAR.
Este colectivo donde la experiencia y la juventud se
acompañan, afortunadamente, tiene hoy el afán de
preservar un patrimonio de todos. Suman muchas las
investigaciones destinadas a libros, películas,
doctorados y maestrías que han hallado aquí su nutriente
esencial. Mientras textos como Misiones en conflicto,
o los audiovisuales Operación Carlota, La
epopeya de Angola, Cangamba y Cuito
Cuanavale se cuentan entre ellos, un mundo de héroes,
revoluciones y osadía aguardan aún para llevar luz, una
vez más, sobre nuestra Historia.
|