Israel gives Micheletti its "secret weapon for troublemakers"
BY JEAN-GUY ALLARD
Oct 2, 2009 10:29 AM

Google translation. Edited by Walter Lippmann.


artefacto_sonoro"Thanks to the Israeli army," announces a newspaper in Tegucigalpa, the National Police has the sonic cannon is now being "used to neutralize violent resistance members."

After the LRAD, also provided by Israel through a local firm owned by a former Israeli military working with the CIA, Honduran troops Micheletti dictator enjoys what La Tribuna calls the "technology that has helped them put down the violence among supporters of Manuel Zelaya."

Called the "Screamer" ("El Gritón"), the device is, according to the putschist's newspaper, being first used "publicly" in Honduras. It's not clear whether the technical hooded police are Hondurans who manipulate or if, as seems likely, they belong to the Zionist armed forces.

Tribuna writes that is "the ultimate secret weapon in a long-time endowment by the army of Israel, used publicly only now after many years of experimentation."

 

THE CROWD "WRITHING PAIN"

The anonymous daily's text notes this occurs as when protesters gather. There "is a white car with two policemen and an equal number of soldiers, with two unknown devices, like loudspeakers, but not conventional, they look modern."

And it states with the same cynicism: "A few seconds after that there are short beeps in the air: The agitated crowd falls into panic, covers their ears and writhes in pain.

The newspaper, another spokesman for the new fascist power, does not say ho many times the gun has been used by Israel against the Palestinians but explained as "not being a deadly weapon, "the Screamer" can cause seizures, nausea and terrible headaches, many yards away.

With evident pride, the newspaper that belongs to the coup boss Carlos Roberto Facussé, a former president of Honduras, said that the use of equipment "is an unprecedented event, which represents a significant change in urban guerrilla tactics."

"Thanks to the Israeli army now in Honduras," the author of the text concludes with evident satisfaction, obviously well-connected to the police apparatus.

La Tribuna's article offers a response to questions that arose after it was revealed a few days ago, the presence of LRAD devices close to the Brazilian embassy where Manuel Zelaya, the legitimate president of Honduras is staying.

Images taken by a photographer of the popular resistance in the middle of the incidents reported the presence of the LRAD device type ("long range acoustic device") of U.S. manufacture capable of emitting loud sounds that can cause serious damage to the ears of its  victims .

The photos also revealed alongside the LRAD's operators, the presence of technicians, helmeted and masked police, who used a device whose features were discovered.

It was nothing less than this Screamer whose sounds indeed caused serious discomfort, then inexplicably, to all persons present at the diplomatic representation of Brazil, a clear violation of all international conventions in respect and protection to be granted nations at embassies in their territory.

President Zelaya himself, in several interviews, accused the troops of the dictatorship of using such instruments of repression. The international press, mostly owned by large monopolies, gave little publicity to this information.

The original owner of La Tribuna, the billionaire putschist Facussé, belongs to the Inter American Press Association, which provides it with money and time to attack progressive leaders of Latin America from its headquarters in Miami.

Shortly after revealing the existence of the LRAD, it was alleged that Yehuda Leitner, a former Israeli official based in Honduras, was the supplier of arms "new" gas and murderers to Honduran dictatorship.

It was learned also that this veteran owned businesses of death in the 80s, to the smuggling of billionaire Gerard Latchinian, supplying arms to the Cuban terrorist and CIA agents Felix Rodriguez and Luis Posada Carriles in their operations then known as Iran-Contra scandal.

New element: the Latchinian smuggler was released in 2002 by the righteousness of Bush, after serving only 18 years of the sentence of 30 to whom had been convicted of a massive drug operation for the Nicaraguan contras.

 

   
   

Israel entrega a Micheletti su "arma secreta para revoltosos”

POR JEAN-GUY ALLARD

“Gracias al ejército israelí”, anuncia un diario de Tegucigalpa, la Policía Nacional tiene el cañón sónico que ahora es “utilizado para neutralizar a los violentos miembros de la resistencia”.

Después del LRAD, también proveído por Israel a través de una firma local propiedad de un ex militar israelí que trabajo con la CIA, las tropas del dictador hondureño Micheletti se beneficia de lo que La Tribuna califica de la “tecnología de punta que les ha ayudado a bajar la violencia entre los seguidores de Manuel Zelaya”.

Llamado el “Screamer” (“El Gritón”), el equipo es, según el rotativo golpista, utilizado por primera vez “públicamente” en Honduras. No se precisa si los técnicos encapuchados de la policía que lo manipulan son hondureños o si, como es probable, pertenecen a las fuerzas armadas sionistas.

Dice textualmente La Tribuna que se trata de “la última arma secreta en dotación desde hace tiempo por el ejército de Israel, usada públicamente sólo ahora después de muchos años de experimentación”.

LA MULTITUD “SE CONTUERCE DEL DOLOR”

Señala el texto anónimo del diario como al ocurrir una concentración de manifestantes, “pasa un carro blanco con dos policías e igual número de militares, con dos aparatos desconocidos, semejantes a parlantes de sonidos, pero no de los convencionales, se miran modernos”.

Y precisa con el mismo cinismo: “Pocos segundos después emite un sonido que corta el aire: La multitud agitada, cae en pánico, se tapa los oídos y se contuerce del dolor”.

El periódico, otro vocero del nuevo poder fascista no precisa cuantas veces el arma ha sido experimentada por Israel contra los Palestinos pero explica como “sin ser un arma mortal”, el Screamer “puede provocar convulsiones, nauseas y terribles dolores de cabeza, a muchos metros de distancia”.

Con un evento orgullo, el periódico que pertenece al capo golpista Carlos Roberto Facussé, ex presidente de Honduras, señala que el uso del equipo “es un evento sin precedentes, que representa un significativo cambio en las tácticas de guerrilla urbana”.


“Gracias al ejército israelí, ahora lo tiene Honduras”,  concluye con una evidente satisfacción el autor del texto, evidentemente bien conectado al aprato policial.

El articulo de La Tribuna ofrece una respuesta a las interrogaciones que surgieron después de revelarse, hace unos días, la presencia de aparatos LRAD a proximidad de la embajada de Brasil donde se encuentra el Presidente legitimo de Honduras, Manuel Zelaya.

Imágenes tomadas por un fotógrafo de la resistencia popular en el medio de los incidentes denunció la presencia del aparato de tipo LRAD ("long range acoustic device") de fabricación norteamericana capaz de emitir un sonido estridente que puede causar daños graves al oído de sus víctimas.

Las fotos revelaron también al lado de los operadores del LRAD, la presencia de técnicos, con casco de la policía y encapuchados, que usaban un aparato cuyas características quedaban por descubrir.

Era nada menos que este Screamer cuyos sonidos, efectivamente, provocaron un grave malestar, entonces inexplicable, a todas las personas presentes en la representación diplomática de Brasil, una violación evidente de todos los convenios internacionales en materia del respeto y de la protección que deben otorgar las naciones a las embajadas en su territorio.

El propio presidente Zelaya acusó en varias entrevistas las tropas de la dictadura de usar tales instrumentos de represión. La prensa internacional, en mayor parte propiedad de grandes monopolios, dio poca difusión a estas informaciones.

El propio dueño de La Tribuna, el golpista multimillonario Facussé, pertenece a la Sociedad  Interamericana de Prensa, que consagra su dinero y su tiempo a atacar a los líderes progresistas de América Latina desde su cuartel general de Miami.

Poco después de revelarse la existencia del LRAD, se denunció que Yehuda Leitner, ex oficial israelí  radicado en Honduras, era el proveedor de armas “novedosas” y de gases asesinos a la dictadura hondureña.

Se supo también que este veterano del negocio de la muerte pertenecía, en los años 80, a la red de contrabando del multimillonario Gerard Latchinian, que abastecía en armas a los agentes CIA y terroristas cubanoamericanos Felix Rodriguez y Luis Posada Carriles en sus operaciones luego conocidas cómo  escandalo Iran-Contra.

Elemento nuevo: el contrabandista Latchinian fue liberado en el 2002 por la justicia de Bush, después de cumplir solo 18 años de la sentencia de 30 a la cual había sido condenado una gigantesca operación de narcotráfico a favor de la Contra nicaragüense.