Asambleas de Balance Municipales de la UJC

Hay que buscarse problemas

Jóvenes militantes de la UJC del municipìo de Cifuentes, en Villa Clara
debatieron sobre la importancia de combatir lo mal hecho 
Por: Nelson García Santos

Correo: digital@jrebelde.cip.cu

Caricatura de Adán, muestra a un hombre con la cara apoyada en sus manos y, de su cabeza sale un brazo blandiendo un macheteCifuentes, Villa Clara.— A buena hora la asamblea se viró al revés, en el justo instante en que un delegado le puso pimienta: «Falta valentía para decir las cosas y llamar la atención, como resultado de no querer buscarse problemas».

Fue el delegado Jorge Vicente Díaz quien lo planteó. Y aunque parezca increíble no hubo mucho debate sobre el particular y en el consenso mudo se abrió paso la irremediable verdad.

Pero, incluso cuando Osnay Miguel Colina, primer secretario de la UJC en la provincia, llamó a profundizar en tan trascendente asunto, se confirmó otra verdad: existen comités de base en que falta el combate contra las ilegalidades y la corrupción.

En el debate, donde el auditorio asumió mayormente la postura de escuchar y no la de expresar criterios en el punto referido, Julio Lima, primer secretario del Partido en Cifuentes, alertó que hay que escuchar lo que informa la administración, pero comprobar, exigirle, como corresponde a la militancia.

Y lo anterior transita por discutir «no solo los temas que se orientan de arriba», como subrayó el delegado Ariel Pérez, sino las dificultades que existen en el entorno del comité de base, entiéndase su centro de trabajo o estudio.

Muy vinculado a este asunto, se discutió que tampoco a veces se aplican a tiempo las medidas disciplinarias; o lo que es lo mismo, falta la inmediatez, el actuar a tiempo.

El joven comunista tropieza una y otra vez sin que se le llame a recapacitar y un buen día, ante un cúmulo de faltas, no queda otra alternativa que aplicarle incluso la separación de las filas.

De hecho, para evitar estas desagradables situaciones, los delegados reconocieron la valía de realizar el señalamiento con la mayor premura posible, y despertar el trabajo preventivo para aplicarlo con aquel que se ve que va por mal camino.

Esa filosofía, se argumentó, tiene que ser universal; es decir, un modo de actuar cotidiano para enfrentar lo mal hecho, también más allá del comité de base.

En definitiva, como esclareció una delegada, hay que dejar a un lado el discurso bonito y hacer tangible todo lo que muy bien se define con palabras.

En ese sentido, la Asamblea Municipal de la UJC en Cifuentes resultó un pasó hacia delante. Y lo fue porque, al colocar la crítica a lo mal hecho como protagonista del debate, se engrandeció.