Robo de electricidad

http://www.granma.cubaweb.cu/2006/12/15/nacional/artic07.html

Enrique Atiénzar Rivero

La inesperada visita de los inspectores de la Organización Básica Eléctrica sorprendió al matrimonio de la casa de renta, ubicada en uno de los barrios residenciales de Camagüey. Por el exceso de confianza no le quedó tiempo a desactivar el metro contador "puenteado", uno de los modus operandi que emplean los infractores para el fraude en el consumo de energía.

Desde enredos de cables como este hasta las más
refinadas fórmulas de fraude se han encontrado.

Los referidos consumidores, persuadidos de las evidencias en su contra, trataron de sobornar a los trabajadores mediante diferentes prácticas.

El hecho no es ficticio. Fue uno de los 131 casos de violación que encontró el Grupo Provincial de Inspección durante un recorrido realizado por varios repartos de la ciudad durante los días 12 y 14 del pasado noviembre. El objetivo era descubrir las irregularidades y frenar el delito, gestión a la que se sumaron funcionarios de sucursales de otros municipios y especialistas de Las Tunas.

El robo de electricidad constituye una violación del Decreto 260, aprobado por el Consejo de Ministros el 9 de diciembre de 1998.

Los especialistas explicaron que el metro contador "puenteado" es una de las formas más sencillas de fraude. Los inspectores en la gestión de supervisión encontraron derivaciones de acometidas, potencial o cable flojo, doble cuchilla, neutro sin apretar, lo que generalmente ocurre en edificios multifamiliares. También los que roban electricidad cambian el disco del metro, fórmula mediante la cual se registra solamente el 33% de la energía gastada.

De los infractores sorprendidos se mencionó el caso del propietario de una heladería, conocida popularmente como Coppelita, quien manipuló el metro y debe resarcir en 20 207 pesos con 20 centavos a la OBE.

Con independencia de la multa por el fraude, cuya cuantía puede llegar hasta 1 000 pesos, los consumidores están obligados a pagar, además, los kilowatts falseados, hasta un año.

El ingreso económico total en favor de la entidad eléctrica por concepto de las verificaciones ascendió a 396 600 pesos.

La OBE agramontina proyecta impartir cursos de adiestramiento a su personal nuevo en el área de lectores-cobradores, y en la calificación de inspectores en momentos en que se demanda un mayor control sobre el uso de la energía eléctrica y el enfrentamiento a las ilegalidades.